A qué saben las despedidas

Estamos acostumbrados a decir que las despedidas son amargas…no siempre, sobre todo si contáis con Soul Kitchen Itinerante.

Uno de los últimos eventos en los que hemos participado fue un vino español para una empleada de Mapfre al que asistieron casi un centenar de compañeros de trabajo.

Da gusto trabajar con gente que sabe lo que quiere y que además te deja aportar ideas al proyecto.

Porque cada trabajo que hacemos nos lo planteamos como único: todos tienen una historia que contar, alguien al que agasajar, o simplemente un rato que compartir.

Aunque la fecha era complicada, el 23 de julio, porque había gente en periodo de vacaciones, al final acudieron casi un centenar de compañeros. Eso demuestra que las empresas las hacen las personas, y que el trato entre los compañeros es muy importante.

Nosotros sólo nos encargamos de ponerle un buen sabor de boca, con un catering preparado para la ocasión.

Con productos de temporada y elaborados de una forma diferente, porque la primera forma de comer no es con la boca, sino con los ojos: desde sándwiches enjaulados, nuestros dulces en tarrinas de cristal o nuestras latas para no dar la lata.

Que hay que mover atrezo para la ocasión, no hay problema…quien dijo imposible…en Soul Kitchen Itinerante, sabemos que es un elemento muy importante.

Eso sí, necesitamos de la ayuda de los participantes, un ingrediente estrella, sin el cual no podríamos seguir en esto.

Por tanto, las despedidas saben a sonrisas, momentos compartidos, amigos en la lista, proyectos de futuro y nuevos momentos que compartir.